Una de las características comunes que comparte el galgo con el resto de lebreles, es la de tener el diámetro de la cabeza del mismo tamaño que el diámetro del cuello. Un problema habitual con el que nos encontramos es el de decidir el tipo de collar que queremos que luzca nuestro mejor amigo. El mejor collar para galgo será a la vez seguro, cómodo, práctico y bonito.
Para evitar lastimar a nuestra compañero, el collar más utilizado por su efectividad y diseño es el Martingale, también llamado collar antideslizante, anti escape o de deslizamiento limitado.
¿Cómo funciona y por que comprar un collar Martingale?
A diferencia del collar clásico de hebilla o de clic, al ser más ancho, este collar antideslizante reparte mejor la presión ejercida sobre el cuello. Para ello, debe quedar ajustado, dejando una pequeña holgura de aproximadamente dos dedos entre cuello y collar para evitar posibles rozaduras, molestias y lesiones musculares.
De diseño altamente funcional, el collar anti escape consigue ajustarse, sin asfixiar, en el cuello del animal siempre que intente quitárselo o tire de él con fuerza mientras lo llevamos atado. Para ello está provisto de dos anillas que regulan la parte móvil. Esta se ciñe sobre el cuello del perro cuando tira de la correa.
Podemos encontrar distintos diseños de materiales, estampados y acabados.
Si quieres añadir un plus de elegancia, prueba a combinar el collar Martingale con una correa de paseo a juego.
El collar para galgo de tipo Martingale ofrece a nuestra mascota la máxima comodidad y nos brinda la seguridad necesaria en nuestros paseos diarios.
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